Raoul Wallenberg fue honrado el lunes 9 de noviembre en la ciudad de Nueva York con la inauguración de un monumento en Manhattan, en el cruce de la Primera Avenida y la calle 47.
Una delegación de la Fundación Internacional Raoul Wallenberg, fundación creada en Argentina y que cuenta con la presencia, entre otros, del Premio Nobel Elie Wiesel, Adolfo Bioy Casares, el Miembro de la Cámara de Representantes de los Estados Unidos, Tom Lantos y los Presidentes de la República Checa y Hungría, Vaclav Havel y Arpad Goncz, respectivamente, asistió a la ceremonia invitada especialmente por el alcalde de la ciudad, Rudolph Giuliani y el Consulado General Sueco en Nueva York.
El nombre de la escultura es ‘Hope’ (Esperanza) y su autor el artista sueco Gustav Kraitz. La obra estará situada en un espacio triangular en pleno centro de Manhattan, frente al edificio de las Naciones Unidas.
El monumento consiste en cinco columnas, una de las cuales tiene siete metros de altura y estácoronada por una esfera de cerámica azul.
Los laterales tienen grabadas inscripciones que relatan aspectos de la vida y la misión de Wallenberg, así como extractos de la resolución conjunta del Congreso americano por la cual se declaró a Wallenberg Ciudadano Honorario de los Estados Unidos de América en 1981. Al pie de las columnas puede verse un portafolio de bronce como abandonado en un apuro, figura que sugiere el trabajo no finalizado del representante diplomático sueco. El área perimetral está pavimentada con granito procedente del gueto judío de Budapest, contribución de la capital de Hungría para la realización de la obra.
Junto a Giuliani y a Baruj Tenembaum, empresario argentino y fundador de la Fundación Internacional Raoul Wallenberg, estuvieron el premio Nobel de la Paz, Elie Wiesel; Su Alteza Real, la Princesa Victoria de Suecia; Nina Lagegren, hermana de Wallenberg; Nane Annan, esposa del Secretario General de las Naciones Unidas; el gran rabino de Suecia y el donante de la obra, Marcus Storch, hijo de Hilel Storch, uno de los miles salvados por Wallenberg.
El monumento consiste en cinco columnas, una de las cuales tiene siete metros de altura y está coronada por una esfera de cerámica azul. Los laterales tienen grabadas inscripciones que relatan aspectos de la vida y la misión de Wallenberg, así como extractos de la resolución conjunta del Congreso americano por la cual se declaró a Wallenberg Ciudadano Honorario de los Estados Unidos de América en 1981. Al pie de las columnas puede verse un portafolio de bronce como abandonado en un apuro, figura que sugiere el trabajo no finalizado del representante diplomático sueco. El área perimetral está pavimentada con granito procedente del gueto judío de Budapest, contribución de la capital de Hungría para la realización de la obra.
Junto a Giuliani y a Baruj Tenembaum, empresario argentino y fundador dla Fundación Internacional Raoul Wallenberg, estuvieron el premio Nobel de la Paz, Elie Wiesel; Su Alteza Real, la Princesa Victoria de Suecia; Nina Lagegren, hermana de Wallenberg; Nane Annan, esposa del Secretario General de las Naciones Unidas; el gran rabino de Suecia y el donante de la obra, Marcus Storch, hijo de Hilel Storch, uno de los miles salvados por Wallenberg.