¿Por qué el presidente de la Knéset no responde al requerimiento de la designación de una persona de contacto?
Desde hace ya muchos años, he estado tratando con diferentes representantes del gobierno israelí con el fin de solicitar asistencia para la búsqueda de Raoul Wallenberg.
Siendo diplomático sueco, Wallenberg salvó a decenas de miles de personas judías durante el Holocausto en Budapest. Fue arrestado en 1945 por los rusos, y desde entonces su destino es desconocido. El domingo fue su 101avo. cumpleaños. Él es también Ciudadano Honorario de Israel.
Hace aproximadamente un año, Louise Von Dardel, sobrina de Wallenberg, fue invitada por el Presidente de la Knéset, Reuven Rivlin, para hablar en el evento del Centenario Raoul Wallenberg en el Parlamento Israelí.
Louise y yo también fuimos invitados a almorzar con el embajador Oded Ben-Hur, consejero diplomático del vocero. Desde entonces, he estado hablando con Ben-Hur sobre el nombramiento de una persona de contacto para el caso Wallenberg.
La persona de contacto es crucial en este caso. Tal persona sería un “go-between”, o sea un enlace entre algunos de los miembros de la familia de Raoul Wallenberg, activistas de la causa y la Knéset.
A principios de abril le escribí al actual presidente de la Knéset, Yuli Edelstein, una solicitud oficial de la designación de una persona de contacto. Un poco más tarde, recibí una carta muy bien escrita, en la que Edelstein destacó la importancia de la labor humanitaria de Raoul.
Edelstein escribió: «nuestros diplomáticos en el extranjero seguirán cooperando y ayudando en los esfuerzos necesarios con el fin de descubrir la verdad sobre su destino.»
Por desgracia, Edelstein no respondió a mi pregunta acerca de la designación de una persona de contacto, muy necesaria para informar sobre el avance del caso. Retomé el tema con Ben-Hur.
El derivó el caso a Kobi Tzoref, asesor del presidente.
Tzoref tuvo la gentileza de escribirme una carta. Una vez más no se menciona en la misiva el tema de la persona de contacto. Entonces me dirigí a Gila Rothschild, auditor interno y responsable de las quejas del público en la Knéset, con una solicitud para saber por qué Tzoref no había contestado a todas mis preguntas.
Rothschild contestó: «Informo a usted que he hablado con el señor Tzoref y me aseguró que le responderá a la brevedad.»
Finalmente pensé que me habían otorgado lo que había pedido.
Sorprendentemente, Tzoref no respondió. En cambio, recibí una carta de Dan Marzuk, defensor de la Knéset, que escribió en nombre de la oficina del presidente de la Knéset y de su auditor interno. Por desgracia, en la carta de Marzuk no se responde a mi petición de nombrar una persona de contacto.
Al igual que en cualquier otro caso de «desaparecido en acción», el nombramiento de una persona de contacto es un procedimiento estandarizado y en este caso la solución es simple.
Señor Edelstein, por favor hágalo.
Es mi más sincero deseo que siendo usted miembro de la Knéset ofrezca su apoyo para designar una persona de contacto para que podamos conocer el destino de Raoul Wallenberg.
Max Grunberg es el fundador del Comité de Ciudadano Honorario Raoul Wallenberg, Ra’anana, y puede ser contactado por correo electrónico a max@maxgrunberg.com