Ciudad de México (CJL-OJI) – Gilberto Bosques, cónsul general de México en Marsella, Francia, durante los años de la ocupación nazi auspició la salida a México de un gran número de judíos, de líderes de la Resistencia austríaca y francesa, de republicanos españoles y de otros perseguidos.
Dicho diplomático fue homenajeado en una ceremonia organizada por el Consulado General de México en Nueva York y la Fundación Internacional Raoul Wallenberg, a al cual asistieron importantes diplomáticos, líderes de la comunidad judía y miembros de la comunidad latina. Los invitados tuvieron oportunidad de conocer a Jacqueline y Doris Weitz, hijas de Herman Weitz, quien salvó su vida al recibir una de las numerosas visas otorgadas por Bosques. Las hermanas Weitz viajaron especialmente desde Los Ángeles para rendir homenaje y expresar gratitud al salvador mexicano y al pueblo de México.
El cónsul general de México en Nueva York hizo referencia a la importancia y actualidad de la ceremonia en una era en la que los temas de genocidio y asilo están siempre presentes, y destacó la responsabilidad que tienen las naciones en otorgar asilo a quien lo necesita.
Por su parte, Abigail Tenembaum, vicepresidenta de la fundación Internacional Raoul Wallenberg, destacó la labor de dicha organización que se dedica a honrar a salvadores como Gilberto Bosques, cuyo nieto, Gilberto Bosques Tistler, envió un carta de agradecimiento a la Fundación y al cónsul general mexicano por esta ceremonia que rindió homenaje no sólo a su abuelo, sino también a todos los salvadores que arriesgaron sus vidas por el prójimo.
(Fuente: Tribuna Israelita, de la Comunidad Judía de México).