Mientras esperábamos en el hall del hotel, la escuchábamos hablar con Gil Lavedra y Strassera quien, en voz alta, proclamaba ”No podemos decir de cualquier cosa Crimen contra la humanidad… ¡El crimen contra el medio ambiente no es un crimen contra la humanidad!…” Parecía que la reunión con ellos llegaba a su fin, se pusieron de pie, se despidieron, se saludaron pero Strassera seguía… ” Ahora tenemos el tema del Papel Prensa…”
Confieso que a nosotros nos pasó algo parecido, no queríamos que se terminara la charla. Siempre había otro tema y otra pregunta.
Es que no todos los días nos encontramos con una Beate Klarsfeld.
Personas como ella hacen falta en este mundo: audaces, valientes, comprometidas y consecuentes a la hora de defender una causa.
Es difícil abordar una conversación cuando se siente mucha admiración por la persona con la cual se quiere hablar.
Nos costó al principio entrar en tema y contarle lo que hacíamos en la Fundación. Queríamos escucharla a ella, hacerle preguntas, saber sobre su trayectoria, su vida, sus ideas, su manera de pensar, sus sentimientos.
Se interesó por nuestras inquietudes respecto a la educación de los jóvenes en Argentina: la desinformación, los prejuicios, la falta de mirada crítica frente a las noticias que difunden los medios… todo eso que trabajamos en los talleres ”Wallenberg en la Escuela”.
”¿Cómo trabajan con Wallenberg?” preguntó. Nos escuchó con mucha atención.
Al rato, nos encontramos hablando de política internacional, quisimos saber su postura frente a temas controvertidos: Israel, el Islam, la inmigración en el mundo actual…
No pudimos evitar la tentación de preguntarle sobre la famosa bofetada que impartió a un funcionario nazi hace algunos años.
Finalmente, nos contó sobre sus hijos y sobre los avances en la obra grandiosa de su marido, Serge Klarsfeld.
Conocerla, fue un privilegio.
Licenciada Diana Liniado
Programa Educativo Wallenberg en la Escuela
Fundación Raoul Wallenberg
