Durante la Segunda Guerra Mundial, junto a su esposo Jan y amigos, Miep Gies ofreció refugio en Amsterdam a Ana Frank, a su familia y a otros perseguidos.
Cuando en 1944 la familia Frank fue arrestada por la Gestapo la señora Gies preservó el diario de Ana y se aseguró de que no cayera en manos de los nazis.
Su fallecimiento, el pasado 12 de enero a la edad de 100 años, recuerda a Raoul Wallenberg, el diplomático sueco que salvó las vidas de decenas de miles de condenados a muerte por el nazismo en Hungría. Wallenberg, quien de vivir tendría hoy 97 años, fue un detenido desaparecido. Sobre su destino no se tienen noticias desde que fue arrestado por tropas soviéticas, el 17 de enero de 1945.
Otros salvadores prominentes han vivido muchos años; tales los casos de Irena Sendler, de Polonia; Nicholas Winton, de Inglaterra, o el legendario boxeador alemán Max Schmeling.
La Fundación Wallenberg exhorta a futuros padres y madres a que consideren la posibilidad de darles a sus hijos nombres de salvadores del Holocausto para que los ejemplos de estos héroes modernos se recuerden de generación en generación.
Dr. Natalio Wengrower
Fundación Raoul Wallenberg
www.raoulwallenberg.net
enero 20, 2010