”La trágica muerte de la ministra de Relaciones Exteriores de Suecia, Anna Lindh, nos sorprende y conmueve. El brutal asesinato ha cobrado la vida de una madre, de una política brillante y una tenaz defensora de los derechos humanos”
”Anna Lindh era la titular de la misma cartera ministerial que en 1944 encargó a Raoul Wallenberg viajar a Hungría para auxiliar a los judíos de ese país, condenados al exterminio por el régimen nazi. Luego de salvar a alrededor de cien mil personas, Wallenberg desapareció después de ser detenido por el ejército soviético en enero de 1945. La Fundación Wallenberg, ONG cuya misión es educar en el ejemplo de los valores de solidaridad y coraje cívico de los salvadores del Holocausto, considera que este trágico episodio es un nuevo desafío para los defensores de la democracia, la libertad y el respeto por todos los seres humanos, sin distinciones.”