NUEVA YORK, 11 Abr. 01 (ACI).- La Fundación Raoul Wallenberg instituyó un premio en honor al Papa Juan XXIII para reconocer la labor humanitaria de los diplomáticos en el mundo.
La intención de la iniciativa es recordar el papel del Beato Pontífice en la salvación de miles de víctimas del nazismo, en la época en la que trabajó como Nuncio en Turquía.
El premio será titulado ”Nuncio Roncalli” (nombre de pila de Juan XXIII), y su primera edición se hará realidad en un plazo de 60 a 90 días en Roma, según informó el director de la fundación, Baruch Tenembaum.
Tenembaum explicó que una de las pruebas de las actividades humanitarias del entonces Nuncio Apostólico, Mons. Roncalli, fueron las declaraciones del embajador de Alemania nazi en Turquía, Hans Von Pappen, cuya misión en Estambul coincidió con la del diplomático vaticano.
En el proceso de Nüremberg contra los criminales de la Segunda Guerra Mundial, Von Pappen -en defensa propia- dijo que ayudó al Nuncio Roncalli ”a salvar la vida de 20 mil judíos”.
La campaña para premiar a los diplomáticos por sus acciones humanitarias comenzó hace seis meses, con una ceremonia celebrada en la sede de la Misión Permanente de la Santa Sede en las Naciones Unidas, en Nueva York, en presencia del Secretario de Estado de la Santa Sede, Cardenal Angelo Sodano.