El mundo rindió homenaje a los diplomáticos salvadores del Holocausto.
En el año del 50º aniversario del fallecimiento de Aristides de Sousa Mendes (1885-1954), la Fundación Internacional Raoul Wallenberg y el Comité Angelo Roncalli organizaron extensa red de celebraciones alrededor del mundo. Decenas de actividades religiosas, culturales y educativas tuvieron lugar en los cinco continentes. Entre muchos otros países se unieron en el recuerdo Francia, Estados Unidos, el Vaticano, China e Israel.
El 17 de junio marca el día en que el diplomático portugués Sousa Mendes, desobedeciendo las órdenes de su gobierno, comenzó a emitir visas para rescatar a alrededor de 30.000 personas perseguidas por el nazismo que ocupaba Francia en 1940. Su coraje y determinación tuvieron un extraordinario impacto durante los siguientes cinco años de la segunda guerra: inspiró a muchos otros diplomáticos y facilitó rescates similares hasta el final de la guerra.
En Nueva York tuvo lugar una misa dedicada a Sousa Mendes. El oficio religioso se celebró en la iglesia Nuestra Señora de Fátima, en la localidad de Yonkers y estuvo a cargo de Monseñor Celestino Migliore, Nuncio Apostólico del Vaticano ante las Naciones Unidas.
”Este acto es la demostración de que en la vida hay cosas más importantes que la vida misma.”, señaló Baruj Tenembaum, fundador de la Fundación Wallenberg. ”Los judíos debemos mantener el equilibrio entre la queja por lo sufrido y el pleno reconocimiento a las personas que nos ayudaron”, sostuvo Tenembaum.
Entre la nutrida asistencia, que colmó la capacidad del templo, se destacaron las presencias de Gonçalo de Santa Clara Gomes, Embajador de Portugal ante las Naciones Unidas; Alexandre Manuel Galvão Mexia de Almeida Fernandes, Cónsul General de Portugal en Nueva York; Sheila Abranches y Aristides Mendes, familiares de Sousa Mendes y la colorida presencia de decenas de representantes de la comunidad portuguesa en Nueva York luciendo atuendos tradicionales. Finalizado el servicio se llevó a cabo una recepción en la cual la señora Abigail Tenembaum, Vicepresidente de la Fundación Wallenberg, presentó el premio Sousa Mendes e invitó al Sr. Baruch Tenembaum a entregarlo a John Crisostomo, destacado activista portugués dedicado a difundir la vida y obra del salvador lusitano.
En la oportunidad Crisostomo presentó la proyección del film documental ”Diplomats for the damned”, obra cinematográfica que narra las acciones de rescate llevadas a cabo diplomáticos durante el Holocausto. A su término fueron mencionados los nombres de los veintiún países que cuentan con diplomáticos salvadores.
”La historia parece recompensar a los tiranos y malhechores , pues ellos son los héroes y protagonistas en el imaginario de la gente, especialmente entre los más jóvenes. Esta situación debe ser contrarrestada con la difusión de ejemplos positivos”, dijo Cris o stomo. ”Debemos reconocer y honrar a personas que se distinguieron dedicando sus vidas al bien de otros, especialmente a aquellas personas que salvaron vidas. Hoy es un buen momento para comenzar”.
Los homenajes a quien declaró que ”prefería estar con Dios en contra de los hombres que con los hombres en contra de Dios”, recuerdan cómo el accionar de un solo individuo cambió la historia e influyó sobre las conductas de muchas otras personas que se animaron a imitarlo. Por ello el 17 de junio puede ser considerado como el ”Día de Agradecimiento y Reconocimiento” hacia todos los diplomáticos salvadores de la segunda guerra mundial.
En Roma, por su parte, se celebró una misa en la Basílica Santa María en Travestere. El oficio estuvo a cargo del Cardenal Renato Martino, Presidente de la Comisión de Paz y Justicia del Vaticano.
En el curso de las oraciones el Cardenal Martino incluyó una invocación por la convivencia armoniosa entre personas y comunidades de diferentes credos, razas, religiones, así como un pronunciamiento contra el antisemitismo y la discriminación racial.
Antes de finalizar el acto el enviado especial a Italia de la FIRW, rabino Mario Ablin, fue invitado por el alto Prelado vaticano a dirigir la palabra al público. En el curso de su mensaje, Ablin anunció la decisión de otorgar el premio Sousa Mendes al Cardenal Martino quien demostró su satisfacción poniéndose de pie ante el aplauso del público.
”Es nuestro deber recordar a todos los cristianos que sostenidos por su fe, reaccionaron con valentía ofreciendo su ayuda a los judíos perseguidos, a veces bajo el riesgo de perder sus propias vidas. Su bendita memoria debe mantenerse viva”, señaló el Papa Juan Pablo II.
En Bordeaux, la ciudad en la cual Sousa Mendes acometió su gesta salvadora, la ”Medalla Sousa Mendes 50º Aniversario” fue entregada al Padre Bernard Jacques Riviere, en mérito a su prolongada y exitosa dedicación a difundir la obra del ex cónsul portugués.
La Fundación Wallenberg recibió centenares de adhesiones a la iniciativa sin precedentes. Caben mencionar las correspondientes al Primer Ministro de Portugal, H.E. Jose Manuel Durao Barroso; el Representante del Congreso Americano, Tom Lantos; el Premio Nobel de la Paz, Elie Wiesel; el Alcalde de Yonkers, Phil Amicone y la sobrina del Raoul Wallenberg, Louise Von Dardel.
- Se adjunta el listado completo de eventos.