Con gusto recibiremos sus comentarios sobre esta noticia: newsirwf@gmail.com
El 18 de octubre de 2019, en un soleado viernes romano, unas 250 personas fueron testigos de la proclamación del Istituto Salesiano PIO XI como nueva «Casa de Vida» por la Fundación Raoul Wallenberg. La distinción se otorga en reconocimiento al papel desempeñado por esa institución educativa durante el Holocausto.
Durante la ocupación nazi de Roma los padres Francesco Antonioli y Armando Alessandrini se pusieron al frente de una operación de salvataje de judíos perseguidos por el tercer reich. Con la ayuda de sus cohermanos ofrecieron hospitalidad y salvaron las vidas de 70 jóvenes judíos.
En la misma ceremonia las autoridades del colegio presentaron el docudrama «Lo scudo dell’altro. La Memoria del dovere». La película fue realizada por alumnos bajo la dirección de profesionales del cine.
Silvia Costantini, vicepresidenta de la Fundación Raoul Wallenberg, inauguró la ceremonia e ilustró la misión de la ONG creada por Baruj Tenembaum y presidida por Eduardo Eurnekian.
Elena Colitto Castelli, coordinadora para Italia del proyecto, subrayó el coraje de los salesianos y de muchas otras instituciones religiosas en su lucha contra el nazismo.
Por su parte, el Padre Stefano Aspettati, Inspector Salesiano para la Italia Central, recordó el lema de Don Bosco: Es necesario formar ciudadanos honestos y buenos cristianos.
El reverendo Giampiero Palmieri, obispo auxiliar de Roma, explicó el concepto de oración por Hetty Hillesum: Necesitamos orar para mantener la paz de Dios dentro de nosotros, no para pedir salvación.
El embajador de Israel en el Vaticano, Oren David, envió una carta de adhesión. (Leer más abajo).
Casas de Vida es un programa educativo de la Fundación Raoul Wallenberg. Su objetivo es identificar, rendir tributo y difundir las acciones de instituciones o individuos que extendieron una mano solidaria a perseguidos por el nazismo y sus aliados durante el Holocausto. Hasta el momento más de 500 locaciones fueron detectadas en todo el continente europeo.
La historia
Durante la ocupación nazi de Roma entre 1943 y 1944 el Colegio Pío XI de la institución Salesiana de la orden San Giovanni Bosco, ubicado en los suburbios de Roma, albergó a un gran número de niños judíos, hombres jóvenes y algunos adultos.
El colegio era un internado y una escuela vocacional para personas de diferentes grupos de edad.
Los responsables del rescate de los niños judíos fueron el Padre Francesco Antonioli, director del colegio, y el Padre Armando Alessandrini, su gerente administrativo. Los dos fueron declarados Justos por Yad Vashem.
Según un estudio publicado por la Orden Salesiana la lista de rescatados incluye 70 nombres.
La institución les abrió sus puertas durante los nueve meses que duró la ocupación alemana hasta la liberación, el 4 de Junio de 1944.
Algunos pasaron allí sólo unos días, mientras que otros permanecieron durante varios meses.
Los directores Antonioli y Alessandrini pusieron en peligro sus posiciones y sus vidas por el bien de los niños.
El pintor Aldo Di Castro tenía 12 años en ese momento y hoy recuerda vívidamente la fría mañana de invierno cuando llegó al colegio junto a su hermano Renato. Allí su apellido fue cambiado a Barbieri.
Giuseppe Foa también tenia 12 años cuando ingresó al instituto como alumno externo. Su nuevo nombre fue Giuseppe Valente. Maurilio Shlomo Rossi, quien permaneció en el colegio desde el 5 de diciembre de 1943 hasta el 17 de abril de 1944, tenia 21 años de edad en 1943. Fue aceptado en la institución con sus tres hermanos menores, Guglielmo, Gualtiero y Franco y su tío de 43 años, Aulo Camerina.
El 6 de Octubre de 1966 el padre Francesco Antonioli y el Padre Armando Alessandrini fueron declarados Justos entre las Naciones.
1. Invitación
2. Descubrimiento de la placa «Casa de Vida»
3. Elena Castelli, Silvia Costantini, rescatados, descendientes y autoridades del colegio
4. Silvia Costantini, Padre Giampiero Palmieri y Padre Stefano Aspettati
5. Carta del embajador de Israel