El 17 de Enero de 1945 Raoul Wallenberg, el diplomático sueco que salvó decenas de miles de vidas en Hungría durante el Holocausto, fue capturado por el Ejército Soviético para no ser visto nunca más.
La única persona que puede resolver este misterio y ayudarnos a llevar a Wallenberg nuevamente a su hogar es el Presidente de Rusia, Vladimir Putin.