enero 15, 2018

Carta abierta a Vladimir Putin

17 de enero de 2018

Señor Presidente de la Federación Rusa
Vladimir Vladimirovich Putin
23, Calle Ilyinka
103132 – Moscú
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Señor Presidente,

En un nuevo aniversario de la desaparición del héroe de la segunda guerra mundial, Raoul Wallenberg, volvemos a dirigimos a usted, en los mismos términos en que los hemos hecho en la última década sin recibir de su parte respuesta alguna. Escribimos estas líneas en nombre de la Fundación Internacional Raoul Wallenberg, una ONG internacional con sede central en la ciudad de Nueva York.

Una vez más, solicitamos a usted, muy respetuosamente, que su gobierno informe la verdad sobre lo sucedido con Raoul Wallenberg y su chofer, Vilmos Langfelder, ambos detenidos por el ejército soviético el 17 de enero de 1945 y desaparecidos desde entonces.

Los padres de Raoul y su padrastro están enterrados en Suecia. Su hermana, Nina, está viva y merece ver la tumba de Raoul. No podemos dejar de recordar aquí al fallecido profesor Guy von Dardel, hermano de Wallenberg y gran amigo de nuestra fundación; un hombre que dedicó la mayor parte de su vida a esta noble causa.

Nuestra misión principal es preservar y difundir el legado valiente de Raoul Wallenberg y sus semejantes; a saber, las mujeres y los hombres que ayudaron a perseguidos, sin importar religión o nacionalidad.

Entre nuestros miembros se encuentran más de 300 jefes de Estado y personalidades galardonadas con el Premio Nobel. Jorge Bergoglio, el Papa Francisco es uno de los primeros miembros de la Fundación Raoul Wallenberg, cuando cumplía funciones como Arzobispo de Buenos Aires.

Nuevamente ponemos a su disposición la carta del año 2006 firmada por el entonces Ministro Consejero de la Misión de la Federación Rusa en Washington DC, Alexander Darchiev, actual embajador de Rusia en Canadá. Debajo de este párrafo copiamos el facsímil de la carta que dirigiera a nuestra fundación. El embajador Darchiev afirma de modo inequívoco que el señor Wallenberg murió, o más probablemente pereció en la URSS el 17 de julio de 1947″. Además, destaca que “la muerte de Wallenberg recae en el liderazgo URSS de entonces y sobre Stalin personalmente.”

Hemos hecha pública esta carta en numerosas oportunidades ante las autoridades rusas pero nunca hemos recibido información ni ofrecimientos de colaboración que conduzcan a la resolución de un misterio que ya cumple 73 años de triste vigencia.

Hace algunos años, nuestra ONG ofreció una recompensa económica significativa de 500.000 euros a cualquier persona o entidad capaz de ofrecer información científicamente verificable sobre el paradero de Raoul Wallenberg y Vilmos Langfelder, ambos detenidos por el ejército soviético el 17 de enero de 1945. Ciertamente no estamos buscando una investigación sobre las circunstancias de la detención y desaparición de Wallenberg y Langfelder. Estos hechos ocurrieron hace mucho tiempo en un contexto histórico particular, a raíz de la guerra más sangrienta de la humanidad. Nuestro único objetivo es darle un cierre a esta injusta tragedia.

Señor Presidente, los firmantes de esta carta están dispuestos a viajar a Moscú con el fin de reunirse con usted y coordinar todas las medidas necesarias para facilitar el regreso de Raoul Wallenberg a su tierra natal. Creemos firmemente que Raoul Wallenberg merece nuestro reconocimiento y que Rusia, como líder mundial, debe y merece jugar un papel clave en este esfuerzo humanitario.

Muy respetuosamente,

Eduardo Eurnekian
Presidente

Baruj Tenembaum
Fundador

www.raoulwallenberg.net