Un busto de Raoul Wallenberg, diplomático sueco y salvador de miles de vidas durante el Holocausto, fue descubierto en La Plata el 23 de octubre.
La ceremonia estuvo a cargo del intendente, Oscar Pablo Bruera, acompañado por Eduardo Eurnekian y Baruj Tenembaum, presidente y creador de la Fundación Raoul Wallenberg, ONG que donó el busto a la ciudad.
El acto homenaje, en el año del centenario del nacimiento del “Héroe sin Tumba”, se llevó a cabo en el cruce de las calles 51 y 10, y contó con la presencia de las embajadoras Charlotte Wrangberg de Suecia y Dorit Shavit de Israel.
Bruera indicó que lo llenaba de “emoción tener esta magnífica obra de bronce que homenajea a una persona que revaloriza la solidaridad y la paz”.
Eurnekian señaló: “Es mi anhelo que esta pieza recordatoria de uno de los más grandes héroes de la historia moderna, se conserve como símbolo imperecedero de las acciones de quiénes extienden una mano solidaria al prójimo necesitado”, al tiempo que agradeció al empresario argentino Ricardo Faerman por su condición de “factor cardinal en esta Empresa del Espíritu, gracias a quien esta ceremonia es posible”.
El busto de 75 centímetros de altura es obra del artista argentino Gerónimo Villalba. Fue fundido en bronce y realza con singular precisión los rasgos del héroe de la segunda guerra mundial quien, en una gesta humanitaria excepcional y en solo seis meses de labor, salvó las vidas de miles de perseguidos por el nazismo y sus aliados en la Hungría ocupada por el Tercer Reich.
Wallenberg nació el 4 de agosto de 1912 y desapareció en el sistema carcelario soviético luego de ser detenido por el Ejército Rojo el 17 de enero de 1945. La Fundación Wallenberg anunció una recompensa de 500.000 dólares por información sólida y comprobable sobre el paradero de Wallenberg y su chofer, también desaparecido, Vilmos Langfelder.
La ocasión fue propicia para la entrega de la Medalla Conmemorativa del Centenario a Laszlo Ladanyi y Tomas Kertesz, sobrevivientes del Holocausto, ambos salvados por Raoul Wallenberg; al Profesor Paul Levine, Universidad de Uppsala, autor de la obra “Wallenberg en Budapest”; a Natalio Wengrower, histórico dirigente comunitario argentino, y al propio Bruera.
Entre los asistentes se encontraban el diputado nacional Héctor Toty Flores, la consagrada soprano argentina Paula Almerares, la artista plástica Norma D’Ippolito, el cónsul Honorario de Francia, Alejandro Lucchelli Bernard y Danny Rainer, vicepresidente de la Casa Argentina en Israel Tierra Santa, sede Jerusalén y Perla Graisman, Directora de Desarrollo Gobal de la Fundación Raoul Wallenberg.