Homenajes
En la búsqueda de todo aquello que une a los miembros del catolicismo y del judaísmo, la Fundación Internacional Raoul Wallenberg (IRWF)- creada por Baruj Tenembaum junto a otros Argentinos, se ocupa de bucear en la historia, detectar y homenajear a todas aquellas personas -cristianas en su mayoría- que arriesgaron su vida para salvar judíos del Holocausto.
La principal figura encontrada por la fundación -que lleva el nombre de un diplomático sueco desaparecido que se cree que salvó a 100 mil judíos- fue monseñor Angelo Roncalli, a la postre el papa Juan XXIII. Las investigaciones arrojaron que Roncalli -siendo Nuncio en Estambul- impulsó la distribución masiva de certificados de bautismo que le evitaron la muerte segura a unos 24 mil judíos, según testimonios brindados ante los tribunales de Nüremberg.
Roncalli también colaboró activamente en la distribución de miles de visados turcos- para huir vía Turquía-, certificados de inmigración a Palestina, así como pasaportes y certificados de nacionalidad de países neutrales, que posibilitaron salvar a otros tantos judíos. La fundación creó un comité internacional para difundir la actitud de Roncalli, que en su lanzamiento en 2000 en la ONU contó con la presencia del secretario de Estado del Vaticano, cardenal Angelo Sodano.Pero también detectó a muchos que hicieron lo propio en otros países, especialmente Polonia, Italia, Francia y Portugal (entre ellos el cónsul en Bordeaux, Francia, Sousa Mendes). El 30 de este mes,la fundación tiene previsto homenajear en la Embajada de España a un grupo de diplomáticos españoles. ”Se trata de funcionarios públicos, todos ellos católicos, quienes, sin que mediara orden alguna del gobierno filonazi de Francisco Franco, tomaron la iniciativa de auxiliar a miles de condenados a muerte por el régimen de Adolf Hitler”, declaró Tenembaum.
Añadió que se trató, en suma, de personas que ”simplemente, pero con gran valentía, obedecieron el mandato bíblico: ”Amarás a tu prójimo como a tí mismo”.