Luiz Martins de Souza Dantas, nacido un 17 de febrero de 1876, fue un diplomático brasileño que otorgó una vía de escape a los perseguidos en Alemania, algunos de los cuales terminarían siendo protagonistas de historias excepcionales.
Es amplia y justamente reconocido como el más prominente salvador de America Latina. Durante su gestión como Embajador de Brasil en Francia y en Vichy, Luiz Martins de Souza Dantas ayudó a huir de Francia a unas 800 personas, incluyendo a 475 judíos.
A partir del año 1937, Brasil había prohibido la emigración judía a Brasil. En octubre de 1940, Souza Dantas solicitó al Ministro de Relaciones Exteriores del Brasil, Osvaldo Aranha a que le autorice «a entregar visas en casos excepcional, u otros documentos de identificación, bajo mi responsabilidad».
El Ministro le otorgó la autorización y Souza Dantas la interpretó y aplicó en forma liberal, entregando cientos de visas a judíos y refugiados no judíos en la zona no ocupada, con el objeto de permitirles huir de Francia.
Aun así, los beneficiarios de estas visas fueron considerados «indeseables» por el gobierno brasileño. Souza Dantas era perfectamente consciente de que estaba infringiendo las instrucciones de los decretos enviados por su ministro a todas las misiones diplomáticas brasileñas en el mundo, que estipulaban la prohibición de entregar visas a «semitas» o «indeseables».
Gracias a las «transgresiones» cometidas por el embajador, cientos de judíos pudieron abandonar Francia y Europa. Sin embargo, algunos de ellos no lograron llegar a Brasil antes de la fecha de vencimiento de sus visas y posteriormente fueron obligados a retornar a Francia. Cuando las autoridades brasileñas se preparaban para emprender acciones judiciales contra Souza Dantas, ya había alcanzado la edad de jubilación, lo que le ofrecía total inmunidad.
La Fundación Raoul Wallenberg homenajeó a Souza Dantas en múltiples ocasiones y en variadas formas, incluyendo la gestión de una estampilla conmemorativa con su semblanza, emitida por la Autoridad Postal del Estado de Israel.
Asimismo, la ONG apoyó la edición de dos libros escritos por el Profesor Fabio Koifman – «Quijote en las Tinieblas» y «Two Diplomats and People in Need» (este ultimo, en colaboracion con la Embajada de Brasil en Suecia) y la producccion de un filme documental que relata su gesta heroica – «Dear Ambassador» de Luis Goulart.
Algunos de los rescatados por Souza Dantas se convirtieron en personas celebres, tal como el difunto mercader de arte, Leo Castelli, y el afamado banquero y diplomático Felix Rohatyn, mundialmente reconocido por haber salvado a la ciudad de Nueva York de la quiebra en la década del 70.
Rohatyn, banquero de inversión, logró algo que pocos creían posible en 1975: lograr la mediación entre la ciudad de Nueva York, sumergida en una imponente deuda, y sus acreedores y sindicatos, evitando así una trágica bancarrota para miles de personas.
Más tarde Rohatyn fue nombrado embajador de Estados Unidos en Francia, cerrando así un curioso círculo virtuoso. «Si no fuera por Souza Dantas, en vez de estar aquí, mirando la Estatua de la Libertad, hubiera terminado hecho cenizas en Auschwitz», comentó el diplomático.