John Crisostomo (der.) junto al Primer Ministro de Portugal, Dn. José Manuel Durao BarrosoJohn Crisostomo, miembro de la Fundación Internacional Raoul Wallenberg, realizó una visita a su país natal, Portugal, con el objeto de coordinar la participación de los distintos factores que constituyen el ‘Arco Iris Armónico’ del movimiento intercultural que se iniciara hace treinta y cinco años en Buenos Aires y Jerusalem.
Al cerrar el programa de actividades del año 2001, Crisostomo organizó una convocatoria en nombre de Baruj Tenembaum, fundador de dos exitosas ONG y definirá los programas para el año 2002.
En Lisboa el destacado filántropo se reunió con el Primer Ministro de Portugal, Don José Manuel Durao Barroso, así como con los familiares de Aristides de Sousa Mendes, ex cónsul portugués en Bordeaux y salvador de miles de refugiados, en su mayoría judíos, en 1940. Sousa Mendes es uno de los numerosos integrantes del programa de la FIRW ‘La Diplomacia y el Holocausto’, iniciativa educativa que rinde tributo a los hombres y mujeres del servicio exterior de decenas de países quienes, desobedeciendo las órdenes de sus gobiernos, auxiliaron al prójimo necesitado, aún a riesgo de su seguridad y la de sus familias.
La misión de Crisostomo lo condujoa Leiria, zona en la cual se encuentra el poblado de Fátima. Allí se reunió con el Obispo Serafim Ferreira a quien presentará el proyecto de erigir en el centro internacional de peregrinos un Mural recordatorio de las víctimas del Holocausto similar al emplazado en la Catedral de Buenos Aires en 1997, gracias a la labor de la ONG Casa Argentina en Jerusalem y la decisión del inolvidable ex Arzobispo de Buenos Aires y Primado de la Argentina, Cardenal Antonio Quarracino. No existe en todo el mundo un memorial dedicado a los asesinados en la Shoá dentro de un templo cristiano. Quarracino, fallecido en 1998, ha pasado por este gesto a la historia de las relaciones judeo-católicas, siguiendo la huella indeleble del Papa Juan XXIII (Angelo Giuseppe Roncalli).
En Lisboa, Crisostomo mantuvo una reunión con el Cardenal José de Cruz Policarpo y con el presidente de la comunidad judía portuguesa, Samuel Levin.
La FIRW y el lanzamiento de su Comité Internacional Angelo Roncalli encuentran en John Crisostomo a un cabal humanista que inspira empresas del espíritu en los cinco continentes.
